martes, 9 de marzo de 2010

Me levanté pensando en cuántas veces uno, y cuánto tiempo yo o cualquiera pierde en. Es todo un asunto ponerse a contar entonces, esos momentos en los que uno se siente que no está perdiendo nada, o también esos momentos que uno busca perder, pero volver a encontrar, no de esos que los perdés, para no encontrarlos nunca más, y que dios te ayude. No es que quiera decir que es una avalancha que corre sin parar y me pisa la cabeza, pero tampoco es que uno tenga la potestad de decidir hasta cuándo sí.